<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d12259601\x26blogName\x3dNUESTRA+VOZ+SIEMPRE+ES+ESCUCHADA\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dBLACK\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://nuestravoz.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3des_PE\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://nuestravoz.blogspot.com/\x26vt\x3d363419944070643275', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>

sábado, junio 04, 2005

Una noche de viernes

Ayer salí del trabajo super matado, luego de un largo viernes de chamba, decidido a pasar una noche tranquila, llegar a cenar, ver un poco de tele y dormir temprano para, tal vez, malograrme un poco el sábado en la noche.
Como es costumbre, a punto de 9 de la noche, me dirigí al centro de labores de mi novia con el fin de dejarla en su casa y dejarme caer en las manos de morfeo. Pero otra fue mi sorpresa. Uds saben como son a veces la mujeres - y las chicas me darán la razón - y cuando algo se les mete en la cabeza, es difícil sacárselo.
- Los chicos dicen para ir a
Tributo Bar.
- Sorry amor, estoy super cansado. Lo dejamos para otra noche - respondí.
"Sorry amor", dos palabras que muchas veces utilizamos antes de una frase que sabemos no les va a gustar. "Lo dejamos para otra noche" es lo que a continuación profesamos como si pensáramos que eso nos va a salvar de una potencial pelea. Y es que es así. Porque lo que a continuación vino fue:
- Pero yo también estoy cansada.
Ufffff, eso si que fue bajo. Lo importante no son las palabras, sino el tono dulce y tierno con que las dice y que demuestra que ella está dispuesta a sacrificar 3 o 4 horas de sueño con tal de pasar una terapéutica salida a tomar algo y a conversar. Lo que ahora toca es pensar ¿y yo? ¿estoy dipuesto?
Los hombres dirán:
- Si ese pata acepta, es un pisado.
La mujeres dirán:
- Si no acepta, es un maldito que no puede hacer un pequeño sacrificio por ella.
Yo digo:
- ¿A quién le importa quién gana o quién pierda? Esto no es una competencia. Por lo menos yo no pienso que lo sea.
Sé que eso la haría feliz, y sé que cuando ella esté cansada y yo quiera salir va a tomar en cuenta este momento y la pasará bien.
Y así fue. Estuvimos con dos parejas más conversando del trabajo y de quién ganaba ahora, Perú o Colombia. Y la pasé muy bien, me tomé un whiskicito (un vaso nomás), música en vivo con un grupo que tocaba grandes éxitos en inglés y español, y entre todo el barullo, noté que ella estaba pasándola super bien. Eso me hizo pensar que valió la pena no dormir unas horas.
Ahora de vuelta al trabajo, sin resaca, pero casi sin voz por una pequeña afonía. Sé que en el partido de Perú la perderé totalmente.
Aquí algunas fotos que cuelgan todas las semanas en su web.

Fredy y Vani


Tributo Band

© Copyright 2005 / Fredy Zegarra